PALO CORTADO DE LA CRUZ 1767

96,22 pts.
Catado
9
veces
El Palo Cortado es un tipo de vino de Jerez, de crianza oxidativa, muy complejo y escaso. Se caracteriza por tener una nariz fina y delicada como la de un amontillado viejo y una boca con gran estructura y persistencia como la de los olorosos viejos.
• Ficha de cata: El Palo Cortado de la Cruz de 1767, presenta un magnifico color oro viejo natural, obtenido exclusivamente gracias al prolongado envejecimiento en botas de roble. La limpidez y brillo que presenta el vino, también es debido a la estabilidad natural que se consigue con tantos años de permanencia en las botas, pues este vino para preservar sus cualidades organolépticas, no se ha clarificado ni tratado por frio antes de su embotellado. Respecto a sus características a la nariz, podemos decir que el vino tiene una gran cantidad de matices aromáticos, de entre los cuales predominan los aromas de roble y sus derivados, los frutos secos y especies como vainilla o clavo. En boca, sorprende la suavidad con la que entra, siendo un vino absolutamente seco y con tanta estructura. Su magnífica acidez, próxima a los 7,0 gr/l. en tartárico, conseguida por concentración y su graduación alcohólica 18% vol. le dan el equilibrio necesario para conseguir esto, a la vez que fijan el retrogusto y lo hacen largo y poderoso.
• Recomendaciones de maridaje: Es un vino que nos da múltiples oportunidades de disfrute, como aperitivo, con todo tipo de embutidos, con los quesos es de los pocos vinos que soporta nuestros quesos fuertes, cabrales o manchegos viejos. Durante la comida, acompaña magníficamente a nuestros platos de cuchara de la dieta mediterráneos, la típica berza andaluza, la fabada, el cocido,
etc.., también es perfecto para las carnes de caza. Y en la sobremesa, puede sustituir perfectamente a los destilados.
• Debido a su escasez y para mantener la calidad en el tiempo, la producción de este vino está limitada a 6.000 botellas al año.
PANDO FINO

91,71 pts.
Catado
5
veces
Nota de cata: vino de color oro pajizo muy brillante. Aroma intenso y complejo que recuerda a la “flor” por sus notas aldehídicas. Al paladar es muy seco, delicado pero con cuerpo. En el post-gusto deja una agradable sensación de frescor.
• Preferencia de consumo: vino ideal para el aperitivo y para todo tipo de tapas, en especial aceitunas, frutos secos y jamón ibérico. Acompañante ideal de mariscos y pescados, en especial de aquellos con un marcado sabor salino (anchoas) y con los crudos (sachimi).
Elaboración: Mostos de primera yema de nuestros mejores pagos, decantación estática en frío y fermentación a 22ºC, deslío temprano, clasificación por finura, fortificación a 15º con los mejores destilados de vino para obtener los tradicionales sobretablas, paso al sistema de crianza y envejecimiento dinámico, clásico jerezano de Criaderas y Soleras, por la 9ª criadera en donde tiene lugar la crianza biológica bajo velo de flor en las tradicionales botas de roble preferentemente americano de 30 y 36 @ de capacidad durante un tiempo mínimo medio de 8 años y mientras discurre por las criaderas hasta llegar a la solera de donde se realiza la “saca” para el consumo