Rojo cereza intenso, profundo.
Fuertes aromas de maderas nobles conjuntadas con el recuerdo de frutas rojas, y fondo especiado (vainilla, comino) rasgos de tabaco, hojarasca y una fugaz estela de tonos mentolados que dan al conjunto unos complejos aromas característicos de Bodegas Briego .
La entrada en boca es aterciopelada, abriéndose y descubriendo en la misma una explosión de sabores conjuntados como frutas, vainillas, canelas, etc.
Muy persistente y acompañado de una acidez característica de los grandes vinos Ribera del Duero
Resulta imprescindible abrir la botella 15 ó 20 minutos antes del consumo.
