Después de una maceración pre-fermentativa en cámara de frío, la entrada de uva en los depósitos se lleva a cabo por gravedad, tras un despalillado preciso y un estrujado casi inexistente, mediante OVI´s y cintas transportadoras
La fermentación alcohólica tiene lugar a baja temperatura con levaduras autóctonas propias del Pago de Carraovejas en pequeños depósitos de acero inoxidable y tinas de madera de roble francés, gestionado bajo “Haute futaie”. A su vez tienen unas características de diseño muy concretas que propician una fermentación con amplia superficie de sombrero para un mayor contacto entre el hollejo y el mosto. Esta singular forma de encubado consigue una fermentación intra y extracelular que proporciona a sus vinos unas características plenamente diferenciadoras.
Los remontados se realizan mediante gravedad ayudados por OVI´s y la fermentación maloláctica se lleva a cabo en los mismos depósitos y tinas, por las bacterias lácticas autóctonas propias del Pago de Carraovejas. Estas, junto a sus levaduras, son fruto de intensos estudios acerca de los microsistemas presentes en sus viñedos y procesos fermentativos, respetando las propiedades de cada añada, y en defensa del terroir.
